El Bote del tesoro, un regalo sorpresa por que sí

A lo largo de la semana pasada me llegaron noticias creativas sobre niños que impulsaban proyectos. Tan pequeños y tan poderosos se sienten a veces…, ¡ capaces de mover el mundo !. Y es que la magia de la infancia es lo que tiene, que no necesitan el empujón que los adultos reclamamos para comenzar algo nuevo. Su camino es mucho más directo.

Karina me presentó a Hannah que ya ha logrado hacer un parque en su barrio. Y Bea a la familia de «Sequoia Family» que está enseñando geografía a su hijo llenando un gran mapa de postales para lo que cuentan con todos nosotros.

Mi hija mayor no me ha salido tan lanzada, pero viendo el video se le ocurrió una idea estupenda: hacer un «bote del tesoro», esconderlo y esperar a que alguien lo encuentre.

 

Nos llevo dos largas tardes terminar el proyecto, entre encontrar el bote, pensar qué meter, y salir a dejarlo en la calle. ¡ Toda una aventura!.

 

Este fue el resultado:

Metimos en él cosas que le pudieran gustar tanto a un niño como a una niña: Un cuento, unos imanes para que descubra lo que queremos decirle, una maceta para plantar una semilla ahora que llega la primavera, un avión de papel fabricación casera, y unas monedas para que se compre algo si no le gusta lo que hay.

Después, nos lanzamos a la calle, alguna ya en pijama, cual exploradora-detective buscando el sitio ideal.

¡ Esta ha sido nuestra decisión !

Y así vamos a pasar la semana, cada día uno.

Si eres la persona afortunada que lo encuentra estaremos encantados de que nos escribas para decirnos lo que más te ha gustado.

Te proponemos que llenes tu bote con cosas chulas que tengas por casa y lo vuelvas a dejar en tu sitio secreto para que otro niño listo como tú lo descubra. Verás como al instante notas que te acercas más a ese super detective en el que te vas a convertir !.

¡ GRACIAS !